El Reiki se ha convertido en una terapia complementaria ampliamente reconocida en el cuidado del cáncer, proporcionando un apoyo emocional vital y alivio de los efectos secundarios de los tratamientos.

Aunque no reemplaza la atención médica convencional, el Reiki ayuda a los pacientes con los que trabajamos promoviendo una profunda relajación, reduciendo el estrés y aliviando el dolor. Muchos nos dicen que, a pesar de los rigores de los efectos secundarios que experimentan durante los tratamientos contra el cáncer, se sienten más equilibrados, con una mejor sensación general de bienestar después de sus sesiones de Reiki.

La Sintonización de Chakras apoya aún más el proceso de sanación ayudando a realinear y equilibrar el sistema energético del cuerpo, que a menudo se ve alterado durante la enfermedad.

Este equilibrio holístico contribuye a fortalecer el sistema inmunológico, mejorar la estabilidad emocional y mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer durante el tratamiento y en la recuperación.

Juntos, el Reiki y la Sintonización de Chakras ofrecen un apoyo suave y no invasivo durante uno de los momentos más desafiantes de la vida.

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